Hay una morada cuyas paredes son de amor,
donde nacen los versos,
donde encuentra refugio este corazón.
Hay abrazos que esperan por mí,
y una voz dulce que me conduce hasta allí.
Al entrar todo es perfecto,
me acomodas tras la vibración de tus latidos.
Es fácil creer cuando estoy en ti.
Me veo arraigada en cimientos de amor,
cubierta de un manto de luz que me abriga.
Sé que estoy en mi lugar,
soy una de las piezas que forman tu corazón,
la plenitud de aquel que todo lo llena en todo.
Me hace sentir deleites,
momentos espontáneos de éxtasis de amor,
y es todo lo que necesito.
Él es quien deshace la confusión,
quien me guía en camino seguro,
por sus sendas de rectitud.
Me basta con mirar solo a sus ojos,
esas lámparas de fuego que me conducen al amor,
entonces el entorno desaparece,
las voces se acallan,
quedamos vos y yo.
Recuerdo que somos uno,
que mi vida te pertenece a vos.
Has cuidado de mi desde pequeña,
lo sigues haciendo,
me encuentro en tu corazón.
donde nacen los versos,
donde encuentra refugio este corazón.
Hay abrazos que esperan por mí,
y una voz dulce que me conduce hasta allí.
Al entrar todo es perfecto,
me acomodas tras la vibración de tus latidos.
Es fácil creer cuando estoy en ti.
Me veo arraigada en cimientos de amor,
cubierta de un manto de luz que me abriga.
Sé que estoy en mi lugar,
soy una de las piezas que forman tu corazón,
la plenitud de aquel que todo lo llena en todo.
Me hace sentir deleites,
momentos espontáneos de éxtasis de amor,
y es todo lo que necesito.
Él es quien deshace la confusión,
quien me guía en camino seguro,
por sus sendas de rectitud.
Me basta con mirar solo a sus ojos,
esas lámparas de fuego que me conducen al amor,
entonces el entorno desaparece,
las voces se acallan,
quedamos vos y yo.
Recuerdo que somos uno,
que mi vida te pertenece a vos.
Has cuidado de mi desde pequeña,
lo sigues haciendo,
me encuentro en tu corazón.
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